sábado, 15 de diciembre de 2007

Sólo una vez


Dicen que hay algunas cosas que nunca se pueden recuperar, se me ocurren siete:

1. Una palabra..., después de haberla dicho.
2. El presente..., si es que existe.
3. Una piedra..., después de haberla lanzado al mar.
4. Una favorable ocasión..., después de no haberla aprovechado.
5. Esa sonrisa inocente..., después de que te visita la malicia.
6. El primer beso..., aunque ya no te acuerdes a quien se lo diste.
7. Ese brillo en los ojillos..., después de que ya no te quieren.

Seguro que vosotros conocéis algunas más.

2 comentarios:

unknow dijo...

olas, lo creas o no te entiendo perfectamente espero k sigas publicando...
Un saludo.

Anónimo dijo...

* Contemplar un amanecer o ver las estrellas junto a alguien que ya no está...(aunque se pueden ver amaneceres acompañad@ de otros seres queridos).
* Las piernas o miembros de niños y mayores que las guerras,atentados y catástrofes con sus minas, bombas y desgracias acaban destrozando.(aunque con ayuda ortopédica, a veces muy rudimentaria por la falta de medios, y con resignación, mucho amor y sencillez, se vuelve a caminar, a jugar y a sonreir.
* La mirada transparente con la que todos nacemos.(aunque pensándolo mejor, si nacimos con ella, quizá nunca se pierda, o muy poc@s son capaces de descubrirla en l@s dem@s)

-Una palabra ya pronunciada no se puede recuperar, pero se puede rectificar ante lo dicho.
-El presente tampoco se recupera, porque cuando lo vives ya es pasado, pero puedes pensar en lo que está por venir y hacer aquello que en su momento no pudiste.(Hay que vivir sabiendo que algún día moriremos y actuar en consecuencia...)
-Una piedra lanzada al mar es irrecuperable,cierto, pero habrá más piedras donde escoger,y puedes pensarlo dos veces antes de lanzar alguna... hay sitio en el bolsillo para guardarla a buen recaudo.
- Una favorable ocasión desprovechada da lugar a aprovechar la siguiente ocasión favorable que se presente (a no dejarla escapar si la hubiera).
- La sonrisa inocente se puede recuperar... del mismo modo que la malicia se puede desterrar de la mente y el corazón, aunque en alguna ocasión te haya visitado.
- El primer beso no lo puedes recuperar, porque ya lo diste,y menos si no recuerdas a quién...Pero sí es posible recuperar o sentir algún día de nuevo aquella sensación especial, las mariposillas en el estómago...
- El brillo en los ojillos cuando ya no te quieren, es preferible no recuperarlo, y es mejor pensar que siempre habrá alguien que te quiera...

- Olas que no se recuperan...podria verse de otra forma... vienen y van, y en ese constante vaivén, nunca mueren en la orilla, sino que regresan al mar, de donde vinieron, renaciendo en cada ocasión... se mecen constantemente,y parte de la ola que rozó tus pies, vuelve con la siguiente a hacerte cosquillas de nuevo...

Os dejo un breve cuento, para reflexionar sobre eso.
“ El cuento es de una pequeña ola que va saltando por el mar y lo pasa muy bien.
Disfruta del viento y del aire libre, hasta que ve que las demás olas que tiene delante rompen contra la costa.
-¡Dios mío, esto es terrible!-dice la ola-¡Mira lo que me va a pasar!
Entonces llega otra ola. Ve a la primera ola, que parece afligida, y le dice:- ¿Por qué estás tan triste?
La pequeña ola dice:-¿Es que no lo entiendes?¡Todas vamos a rompernos!¡Todas las olas vamos a deshacernos! ¿No es terrible?
La segunda ola contesta:- No, eres tú la que no lo entiende: Tú no eres una ola; formas parte del mar”.

Un abrazo.
mj