sábado, 23 de mayo de 2009

Cambios


¡Qué tiempos aquellos!
Del blanco y negro hemos pasado al color.
De esos pantalones llenos de pedazos, a la ropa adecuada para cada momentazo.
De esas “albarcas”, a los zapatitos de charol.
De ese negro riguroso, a ese bienvenido colorido.
Del peinado “ to patrás” a las permanentes lacadas, mechas y extensiones.
De la tez oscura y bien morena, moreno de albañil, sin necesidad de playa, a la super protegida cara con filtros donde los haya.
De los vestidos premamá desde el primer momento, a enseñar esa barriguita flotante hasta el último instante.
De la cara arrugada por las inclemencias del tiempo y la edad, a esa misma cara también arrugada pero tratada con esos mil potingues que no han servido para nada.
Del “machoman”, al machito rasuradito.
De la mujer doncella, a la más ligera ella.
De mejor donde haya para agarrar, a la anorexia andante.
De ir tapadita hasta las orejas, a enseñar ese tatuaje por encima de las cejas.
De esa ropa interior altera, a esos tangas “hilo bala”.
De educar en responsabilidad, a abortar sin edad.

Eran otros tiempos y otras circunstancias.

7 comentarios:

Ligia dijo...

Eran otros tiempos, pero la verdad, es que algunos cambios son difíciles de asumir. Abrazos

Luis dijo...

Hola Javier:
Y cuando en un tranvía o autobús notabas algun ligero roce...!!!
Efectivamente, eran otros tiempos...
Cuestan de entender muchas cosas...
Però que hi farem?
Un buen fin de semana, Luis

Alimontero dijo...

jajajajajajá! es que ver esa imagen imposible no reirme...
Todo cambia mi querido, y nadie nos consulta.. así es la "evolución" de la especie...y bué...o nos arrimamos o sonamos!!
Un gran abrazo para ti!

Ali

Hada Isol ♥ dijo...

y si! los tiempos cambian y hoy que ya crecí(hace rato) entiendo bien a mi padre cuando a cada rato decía que "su tiempo" fué mejor,yo pienso igual de mi tiempo! me encantó tu post!

TORO SALVAJE dijo...

Nos vamos quedando atrás.
No se puede evitar.
Aunque algunas cosas cuestan de entender.

Saludos.

Anónimo dijo...

Cada cosa a su tiempo, y al igual que mis padres siempre me decían "cuando yo era como tú, esto no se hacía, decía, etc..." Ahora somos nosotros quienes pensamos lo mismo, e imagino que cuando nuestros hijos estén a nuestra altura, les pasará exactamente igual

Todo va, eso sí que lo pienso yo también, demasiado rápido. Los cambios son ya acelerones.

angela dijo...

Aunque cada generación tiene sus cambios de costumbres la nuestra Javier, me temo que roza a veces la insensatez tanto como lo zafio... Prefiero, la cordura y los cambios con mesura.Un abrazo y disfruta de tu Soria que es un encanto.Un abrazo.Angela